martes, 1 de enero de 2013

2013


AÑO 2013
DÍA 1 de 365
Quizá muchos hagan una lista con los planes y objetivos para este año. Creo que la voy a hacer en unos días, hoy quiero descansar. Quiero visitar a mi familia, reírme un rato y disfrutar de esos pequeños momentos que son los que nos llenan el alma de sonrisas y de recuerdos.
Mañana cumplo 4 años de convivencia con mi marinovio, cuatro años que se pasaron rápido. No podemos creer que vayan cuatro años, no porque no los hayamos esperado, sino porque realmente pasaron rápido. ¿Será que la pasamos muy bien? Creo que sí, porque es una experiencia que le recomendaría a todo el mundo, ya sea que salga bien o mal, convivir con otra persona, ya sea pareja o amiga/o, es una experiencia que nos enseña un montón. Paciencia sobre todo, y saber que cada uno tiene su espacio y su forma de ser también.

Muchos me han estado insistiendo sobre este tema de escribir, según dicen, plasmo bastante bien los sentimientos cuando escribo. ¿Será? Me gusta pensar que sí, que puedo escribir algo que a otro le sirva, le sirva para reírse, de consuelo, de consejo, de opinión. Nunca se sabe quien puede terminar leyendo lo que uno escribe, en esta era informática, todos saben todo sobre todos, y en realidad, vos y yo sabemos que así no se conoce a una persona. Puede mejorar o mantener una relación, pero conocerla, jamás. Para conocer a alguien se necesita verlo a los ojos, aprender sus expresiones, su forma de decir las cosas, aprender a leer sus pensamientos a través de la forma en que se expresa. En fin, la idea es que si alguien lee algo, pueda reflexionar sobre ello y analizarlo, o generar una nueva idea, un nuevo pensamiento, y retransmitirlo a su manera.

¿Cuántas veces nos pasa que leemos algo que nos hace pensar y ver las cosas desde otro lado? Muchas. Y ni siquiera es necesario que ese “algo” sea algo que leemos en un libro de algún autor o persona reconocida, quizá solo leemos una frase en un cartel que aparece en facebook, y esa frase empieza a disparar pensamientos y análisis que no hubiéramos imaginado. Hace un tiempo vengo haciendo ese ejercicio, de tratar de leer mas allá de las palabras de una frase armada, de tratar de comprender más allá de lo que me dice una persona. Es un buen ejercicio, quiero suponer que agiliza la mente, eso de andar pensando y repensando, analizando las cosas.

Volviendo al tema de los objetivos del 2013, que voy a hacer más adelante, me gusta la idea del balance 2012. Desde el año pasado me vienen dando balances positivos, y creo que tiene que ver con un cambio muy mío, porque creo que crecí (o eso espero) y estoy tratando de analizar las cosas desde otro lado, de verle lo positivo a lo que nos pasa.  Debo aclarar, sino sería un poco mentirosa, que ninguna gran tragedia ha tocado mi puerta en estos años, como sí he visto que le ha pasado a gente a mi alrededor, pero, igualmente, estoy haciendo ese ejercicio de pensar realmente las cosas, y tratar de darle el valor que tienen. Quizá por eso decidí para este año, un cambio importante para mí, como lo fue dejar mi trabajo. En busca de algo diferente que me haga plantearme nuevos desafíos y retos. Y constantemente sigo buscando “eso” que me guste tanto como para dedicarle horas de estudio, que estoy segura de que en algún lado está.

Solo espero que haya otros como yo, que puedan hacer el balance, y aunque les de negativo, puedan igualmente plantearse objetivos para el 2013, porque si no tenemos algo por lo que vivir, por lo que luchar, un plan, un objetivo único, múltiples objetivos, va a ser difícil que el balance del año entrante de positivo.

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